Halloween - Les Bombolles: Terror, Garras y Orbit en el Cerebro

 

    Desde un pueblo cercano a Olot, llegaron en autocaravana cinco miembros de la familia Les Bombolles. ¿Por qué en caravana si están a 40 km? Misterios de la logística rural. Se instalaron en la parcela 69.

¿Por qué se instalaron en la parcela 69? Porque la 666 estaba ocupada.

La escena parecía tranquila… hasta que Guss, el personaje más aterrador del camping, se activó. Con máscara verde fosforito, sonrisa de dentista psicópata y manos que parecían tentáculos de pulpo culturista, Guss atrapaba a sus víctimas con un abrazo que ni la abuela en Nochebuena.

“¡Si te coge Guss, ni el Orbit te salva!”
—dicho popular desde ese día, grabado en piedra y en caramelos.

Los que lograban liberarse (tras perder dignidad, equilibrio y algún calcetín) debían recoger sus chuches en un recipiente con forma de medio cerebro, relleno de Orbit y camuflado como “pequeñas burbujas húmedas en el interior”.

Nota científica: nadie sabe qué significa eso, pero sonaba místico y daba hambre.

La Bruja Calabaza, también conocida como Mari La Prima, prima de Mari y hermana de Maria, que vino a pasar el día… y si no llega a sonar el final de fiesta, se queda a tomar las uvas. El reencuentro fue tan emotivo como ruidoso, con hechizos, abrazos y algún grito de “¡Pero si tú eres la del WhatsApp del grupo de las Maris!”

Los payasos Ferran y Julio, adolescentes en misión secreta (o sin misión alguna), se movían entre las montañas de hojas como espías del circo. Nadie supo qué hacían, pero uno acabó con confeti en los pantalones y el otro con una nariz de payaso en el ombligo.

Y no podemos olvidar a Jack el Resplandor, el "Tuso" disfrazado de Chucky, que ladraba con acento de película de terror y perseguía caramelos como si fueran almas perdidas.

“Sonó la música y las Bombolles…”
—dijo alguien, justo antes de que Guss lo atrapara y lo convirtiera en estatua de Halloween.

Posdata: No se pudieron activar las bombolles reales por un fallo técnico. Según Guss, mientras apretaba con sus brazos, “el universo no estaba preparado para tanta burbuja.”